Dos Perras Tengo
Y es genial. Una es grande y la otra es más chica.
La grande ya llegó grande, con sus mambos, sus quilombos, sus mañas, le dicen.
Rompía todo, mordía todo y hacía de todo en todos lados, todo el tiempo.
Una vez salí cinco minutos y, para cuando volví, tiró ocho platos al piso, rompió tres tazas y destruyó mi vida social.
Pero ya no es así. Se sabe comportar cuando estoy y cuando no.
Hace mucho caso; da miedo un poco a veces.
Le digo que se siente y se sienta.
Le digo que ladre y ladra.
Le digo que haga caca y… va, hace caca y vuelve.
Los Ojos Del Tigre
En lugares remotos de Tailandia la gente anda a canoa en ríos angostos encerrados por vegetación espesa.
Y entre la maleza ancha se ocultan depredadores enormes.
Máquinas de matar perfectas.
Doscientos kilos de músculo y cartílago y huesos densos como la piedra y fuertes como los robles.
Colmillos de acero y una mirada de fuego.
Y la gente tiene que llegar a la ciudad a comprar provisiones y las carga en las canoas finitas que se mueven lentamente por el agua calma remando con remos largos que no tocan el fondo.